miércoles, 18 de mayo de 2011

Orgullo, sin prejuicio.

21:45
No podia estudiar, estaba frustrada, estresada, se mordia las uñas.
De repente se quedó pensativa, miró los apuntes que tenia en frente, pensó en lo mucho que tenia que estudiar, pero no podia. Y rompió en un baño de lágrimas. Encendió el ordenador, recogiendose las lagrimas que recorrian sus mejillas, y miró el messenger. Le vio conectado, abrió la pestaña.
Escribió un "hola", se llenó de rábia, pensando en que no debia tragarse el orgullo ella.
Miro la pantalla.
"Esta escribiendo.." leyó. Se le paró el corazón. Parpadeó. El ya no escribia, no le habia llegado nada. "soy una tonta" susurró.
Lo borró todo.
Deseó que el volviera.
Pensó que, si su historia fuese una película, el lo haria. Estaria ahi, en el portal de su casa, bajo la lluvia, hasta que ella saliera. Y suspiró, pensando en que solo con un "lo siento" podria acabar con esta situación, supo que lo podrian arreglar de algún modo, tal vez hablando.. pero los dos éran demasiado orgullosos. Otra lágrima cayó. Era verdad, ella estaba siendo tal orgullosa como el. Empezó a escribir, ya calmada, sin furia, sin rabia, solo con sentimientos.
"¿Sabes que? anoche, tumbada, escuché el latido de mi corazón, sonaba como tus pasos cuando subias la escalera para verme. Ha pasado algún tiempo.. y solo sigo deseando que vuelvas..", suspiró y siguió " Recordé todos esos momentos, pensando en todo lo que hemos pasado juntos, tal vez te he estado recordando demasiado últimamente y soñando que el tiempo se habia parado cuándo aún estabas conmigo.."
Lo borró de nuevo, si, podria escribirle esto, y que el se presentase con un ramo de rosas, y que ella lo perdonase.. y fueran felices pesé a todo lo ocurrido.. Si, en una pelicula.
Y cerró los ojos, y sintió como el la abrazaba, y pudo oir las risas de sus amigos, quejándose de ellos, esa calurosa noche de agosto, como se notaba que ninguno de ellos habia sentido nunca lo que ellos sentian.. Pensó.

"Tal vez mañana si se lo envie.." susurró. Se levantó y camino por el pasillo. "Aquí me dijo la gran mentira" pensó, y pudo oir todavia esas palabras saliendo de su boca, diciendo que nunca nada cambiaria entre ellos dos, que lo suyo lo podia todo.
Volvió atrás, a la habitación y apagó el portatil en seco.
------------------------------------------------------------------------------------------------
21:46
La vió conectarse, cerró los ojos. La echó de menos.
Se acordó de todo, de cada momento, cada beso, cada caricia.. pensó en como habia cambiado todo. En como era todo antes de la pelea, antes de ese maldito instante en que se dió cuenta de que la queria.
Suspiró, deseando volver atrás en el tiempo.
Abrió la ventana de la conversación y escribió: "hola".
Vio que ella escribia.
Paró, sin enviar nada.
Ella lo borró, tampoco envió nada.
Suspiró.
Pensó en que no debia tragarse su orgullo el.
Se quedó pensativo, mirando la pantalla y pensando en ella, en todo lo que habian vivido. Se vió a el mismo, abrazándola por la espalda, se rió, recordándo como sus amigos se reian de ellos siempre.
Abrió los ojos y vio que ella escribia. Esperó. Miró los apuntes en su mesa y pensó en que tenia que estudiar, pero no podia parar el ordenador viendo que ella le escribia.
Ella paró de escribir, pero no le habia enviado nada.
Se quedó pensando, enfadado con el mismo, con el mundo, odiandola a ella, al su orgullo.
Suspiró.
Odió su propio orgullo, se quedó pensativo y escribió:
"Lo siento"
Dos palabras que tal vez cambiarian las cosas, o tal solo permetirian que pudiesen hablar por fin.
"Desconectado", apareció de repente, en el estado de ella.
Borró esas "estupidas palabras" que según el habia escrito. Cerró la pantalla del portatil y suspiró.


------------------------------------------------------------------------------------------------


Los dos sabian que estas cosas ocurrian, que las personas cambiaban.. y recordaban como habian sido las cosas desde ese entonces, y se echaban de menos, simplemente, sin decirse nada el uno al otro. No supieron darse cuenta de nada antes de perderse el uno al otro. Y en ese momento tampoco supieron darse cuenta de que las cosas no las arreglaba el silencio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario