martes, 14 de agosto de 2012

Si me dan a elegir, me quedo contigo

Entras, cierras la puerta.
El reproductor pone una canción al azar. "Esa" canción. Nuestra canción.
En el fondo ambos sabemos que quiero estar contigo. Sentirte cerca.

Me acuesto y me abrazo a mi misma, mientras mis sentimientos se revuelven por dentro.
Te acuestas a mi lado y me abrazas, no me gusta esa sensación (me encanta, pero nunca lo sabrás), y el pasado vuelve a pasearse ante mi retina, como una película con todos los momentos que hemos vivido. La mayoría perfectos, para nosotros.
Cierro los ojos con fuerza, no quiero ver esas escenas.
Suspiras y también los cierras. Respiras, y esa respiración se entrecorta.
Abro los ojos, de repente, y veo como ese suspiro se te escapa a través de los ojos, como una marea surcando tu mejilla.

Deseo, con todas mis fuerzas, volver a esos momentos. No verlos, sino revivirlos.
Deseas, con todo tu ser, volver a abrazarme, protegerme de todo lo posible, y lo imposible también.

Es entonces cuando el tiempo se para.


Entras, cierras la puerta.
-Apaga la luz- susurro- que no quiero ni verte.
Y, al contrario que en tantas otras ocasiones más adecuadas: sonríes. Pero esa sonrisa no te llega a los ojos.

Me acuesto y me abrazo a mi misma, 
te acuestas a mi lado y me abrazas..

"We should love, not fall in love. 
Because everything that falls, gets broken."

3 comentarios:

  1. Desgraciadamente todo lo que tiene un principio tiene un final. Y esto, más que nada.

    ResponderEliminar
  2. Increible, '' veo como ese suspiro se te escapa a través de los ojos, como una marea surcando tu mejilla '' Como puedes escribir tan sumamente bien? Llegarás lejos. Muy lejos. (:

    ResponderEliminar
  3. Esa sensación que tenemos al cerrar los ojos mientras escuchamos una canción. Esa sensación de que cierta canción se convierte en esa persona. Un besazo y enhorabuena por tu blog, me encanta.

    ResponderEliminar